
La experiencia de Víctor
Hoy os ponemos la experiencia de Víctor cómo voluntario de la asociación. Víctor es un chico encantador, amante de los felinos, que se viene desde Madrid hasta Segovia para dedicar un ratito a los gatos en adopción, y siempre está dispuesto a echar una mano en cuanto puede, por lo que le estamos muy agradecidas. Ya lleva varios años con nosotras, y esperamos que sean muchísimos más.
Allá van sus palabras sobre la asociación, y sus fotos con los gatetes:
Yo conocí la gatera aproximadamente en 2013, cuando una amiga adoptó su gato alli. Unos años después adopté la que es mi segunda gata, Eonia, antes Blanquita. Empecé a ir por el refugio un tiempo después de la adopción cuando rescaté un gato que terminó en el refugio.
Se trataba de un gato que llevaba tiempo cerca de una nave abandonada, y estaba bastante desnutrido. Al llegar al albergue se quedó en cuarentena para hacerle pruebas, y aunque mejoraba al principio resultó tener una leucemia que no pudo superar.
Al principio iba por el refugio una vez al mes cuando podía quedar con alguien que me acercara hasta que pude ir por mi cuenta. Cuando voy hago las tareas diarias del albergue, la limpieza de las habitaciones, jugar con los gatos. Normalmente voy sobre una vez al mes cuando puedo.
Lo mejor de ir al refugio es poder jugar con los gatos, especialmente cuando llegan las camadas.
Es un voluntariado divertido y distinto. Es importante que los gatos, sobre todo los más pequeños jueguen y socialicen mucho para facilitar las adopciones de los mismos, lo que hace que pueda ser también una actividad que se puede hacer con los pequeños de la casa.
También hago de vez en cuando las visitas previas antes de dar a los gatos en adopción para ayudar a los nuevos adoptantes y darles orientación.